A partir de ingresos obtenidos en el transcurso del año por el grupo empresarial cubano estatal BioCubaFarma, algunos medicamentos que hoy se encuentran en falta deben tener una mejoría en el último trimestre del año y también a comienzos del 2024, aseguró a Cubadebate Eduardo Martínez Díaz, presidente de la referida entidad.
Aunque este grupo empresarial atraviesa las mismas dificultades económicas que el resto de los sectores del país, como consecuencia de la pandemia y el recrudecimiento del bloqueo, ha logrado cumplir el plan de ingresos de las exportaciones, que se utilizarán para adquirir las materias primas necesarias.
“Por ejemplo, ya hoy se está financiando la materia prima para la producción de Enalapril y la Metformina y pensamos que, durante varios meses, tendremos la estabilidad requerida para la fabricación de estos medicamentos tan importantes para la población”, expresó el también doctor en Ciencias Biológicas.
Explicó que, aunque también han existido bajas coberturas con respecto a los sueros de uso hospitalario, en estos momentos se trabaja para resarcir dicha situación. De igual forma, se labora para restablecer la cobertura de algunas vacunas.
Reconoció que el déficit de medicamentos en el país es un problema muy complejo, ante lo cual “estamos enfrascados en buscar alternativas que conduzcan a mejorar la disponibilidad de medicamentos en los próximos años, en incrementar los niveles de exportaciones y de ingresos al país; así como en fomentar nuevos productos dentro de la cartera comercial como parte de nuestros proyectos de investigación y desarrollo”.
Asimismo, se han puesto en marcha varias acciones encaminadas a desarrollar la biotecnología cubana, las cuales incluyen la puesta en marcha de instalaciones como el complejo ubicado en el Mariel, donde próximamente varias líneas que se encontraban en proceso de validación comenzarán a producir.
“También tenemos una nueva planta para producir antibióticos inyectables como el Rocephin y estamos incursionando a nivel internacional para lograr nuevas exportaciones y acceder a otros mercados que nos permitirían un mayor nivel de ingresos con los cuales cerrar el ciclo.
“De igual forma, tenemos perspectivas con muchos proyectos de investigación y desarrollo que hoy están obteniendo resultados alentadores, lo que habla a las claras del compromiso de los trabajadores de BioCubaFarma en avanzar y en buscar alternativas.
“Estoy convencido de que vamos a logar resultados de magnitud importante para contribuir a la salud del pueblo y también a la economía de la nación”.
—¿Cómo sueña a BioCubaFarma dentro de los próximos años?
Tenemos un amplio plan de desarrollo hasta el 2030 e, incluso, en la actividad de investigación y desarrollo; como ahí los tiempos son más largos, nuestro plan de desarrollo llega hasta el 2040, y te afirmo que la intención es crecer, pese a la política de hostigamiento del bloqueo.
—¿Pudiera emitir algún comentario sobre el fármaco neuroprotector NeuralCIM (nombre comercial de la molécula NeuroEPO) para pacientes con Alzheimer leve o moderado variante amnésica, cuyo ensayo clínico se ha desarrollado en varias provincias cubanas?
En realidad, tenemos hoy en BioCubaFarma varios proyectos encaminados a combatir enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer, el Parkinson, y la ataxia; además de otros tantos asociados al infarto cerebral, que es la tercera causa de muerte en Cuba.
Uno de los más avanzados es el que llamamos NeuroEPO, que, tal como se ha informado, concluyó recientemente una fase importante de ensayos clínicos y después se les ha dado seguimiento a esos pacientes y hemos observado que han tenido una mejoría.
Incluso hay pacientes que se mantienen estables, o sea, que no empeoraron sus síntomas, pero en más de un 50 por ciento de ellos hemos observado una mejoría, lo cual es muy alentador porque esto no es frecuente que ocurra en el mundo.
La tendencia actual de los medicamentos, es decir, lo que más hacen hoy los tratamientos contra el Alzheimer en el planeta es enlentecer, en cierta medida, el empeoramiento cognitivo y la neurodegeneración de los pacientes con dicha enfermedad, ante lo cual nuestros resultados se muestran muy motivadores.
Hoy se aplican en Cuba nuevos ensayos clínicos para consolidar la evaluación y seguir demostrando algunos elementos como parte del desarrollo clínico que aún requiere el medicamento.
—¿Qué opinión le merece el trabajo desarrollo por el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología de Sancti Spíritus (CIGBSS) durante los últimos años?
El CIGB de Sancti Spíritus muestra resultados concretos y se reconoce el aporte de este colectivo de trabajadores durante el combate contra la covid por su participación directa en el desarrollo de las vacunas y de los sistemas de diagnóstico; pero han ido más allá y muestran resultados específicos asociados a reactivos biológicos para el seguimiento y la analítica requerida en el proceso de creación de la vacuna cubana contra el dengue.
La sede del CIGBSS necesita ampliarse, aspecto que también fue analizado en una visita al territorio del Presidente Miguel Díaz Canel Bermúdez en el año 2020, donde el mandatario dejó indicaciones concretas para evaluar este aspecto y finalmente se decidió su construcción en reunión de trabajo con las máximas autoridades de la provincia.
Nosotros nos comprometimos a trabajar de forma ágil y a priorizar la inversión de esta nueva sede para el CIGBSS, cuya construcción cumpliría conceptualmente con las nuevas producciones que se van a establecer; así como con los nuevos proyectos.
Yo les decía a sus trabajadores que el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología de Sancti Spíritus se ha convertido en imprescindible para las producciones de BioCubaFarma y prácticamente todos los anticuerpos monoclonales y policlonales necesarios para el desarrollo de nuevas vacunas y otros productos los elaboran aquí con la mayor calidad posible.